Linfocitos
T
Son
células especializadas del sistema inmune que juegan un papel central como mediadores de
la respuesta inmune celular, son además esenciales en la regulación de la
respuesta inmune.
Sus funciones
son la destrucción de células infectadas o la producción de citocinas que
activan a otras células inmunitarias, como por ejemplo a los macrófagos para
que haga su función de ingerir y destruir al antígeno (fagocitosis) o a los
linfocitos B para que produzcan anticuerpos, o destruir la célula infectada.
Los linfocitos T se originan como
los linfocitos B a partir de una célula madre en la médula ósea, pero a
diferencia de éstos migran al timo para
madurar. De ahí proviene su denominación como linfocitos T. Durante el proceso
de maduración, las células T van adquiriendo diferentes moléculas en su
membrana. Así por ejemplo todas las células T expresan en su superficie un
receptor de membrana de estructura similar a las inmunoglobulinas, conocido
como receptor de la célula T (TCR). Mediante este receptor los linfocitos T son
capaces de identificar al antígeno proteico presentado por las células
dendríticas. Necesitan que el antígeno sea presentado por una molécula del complejo mayor de histocompatibilidad (CMH) una propiedad conocida como restricción CMH. Estas moléculas son de dos tipos: CMH de clase I y II; que se une a CD4 o Cooperador presentado por la célula dendrítica para activar a los fagocitos, y sus subgrupos son:
Linfocitos TH1
|
Linfocitos TH2
|
Linfocitos TH17
|
|
Origen
|
Lo inducen los virus y antígenos proteicos
que ingieren los fagocitos. Su diferenciación esta dirigida por: IL-12,
IL-18, IL-10, IFN-y, TNF
|
La estimula la IL-4, IL-13 e IL-5 en respuesta a los
hemiltos y alérgenos
|
Lo estimula citocinas como: IL-17, IL-21, IL-22, IL-6,
IL-1, IL-2, IL-23 proinflamatorias en respuesta a bacterias y hongos
|
Localización
|
Células Dendríticas, Macrófagos, NK
|
Mastocitos y eosinófilos
|
Células Dendríticas
|
Antígeno reconocido
|
Bacterias intracelulares como: Listeria, y parásitos
como: leishmania
|
Hemiltos y Alérgenos
|
Bacterias
extracelulares y hongos
|
Función
|
Es la principal población efectora de linfocitos T en la
defensa. Activa al macrófago para que ingiera y destruya a los microbios, y
estimula la producción de anticuerpos IgG por medio del IFN-y
|
Mediador de la defensa independiente del fagocito, en la
que eosinófilos y mastocitos desempeñan funciones centrales para erradicar
los hemiltos junto con la IgE, y en la inflamación alérgica
|
Combaten microbios extracelulares reclutando leucocitos
principalmente neutrófilos en la zona de infección, también en hongos y
contribuyen a la patogenia de enfermedades inflamatorias como psoriasis,
artritis reumatoide, esclerosis, enfermedad inflamatoria intestinal
|
Linfocitos
T citotóxicos
Son generadas
en el timo y expresan el receptor
de células T (TCR). Se caracterizan por carecer de la
molécula CD4 y de expresar el correceptor dimérico CD8, compuesto por una
cadena CD8α y otra CD8β. Las células T CD8+ reconocen péptidos unidos a
moléculas MHC de clase I, las cuales se encuentran en todas las
células nucleadas. El heterodímero CD8 se une a una porción conservada (la
llamada región α3) de la molécula de MHC durante la interacción de presentación
antigénica entre células T y APC.
También conocidos con el nombre de linfocitos T citotóxicos, o CTLs, son una importante herramienta contra patógenos intracelulares, como bacterias o virus, y para la vigilancia de las células tumorales. Una vez que la célula T CD8+ ha reconocido su antígeno y se ha activado, posee tres mecanismos para eliminar las células infectadas o malignas. La primera es a través de la secreción de citocinas, como TNF-α e IFN-γ, con efectos antitumorales y antimicrobianos.
También conocidos con el nombre de linfocitos T citotóxicos, o CTLs, son una importante herramienta contra patógenos intracelulares, como bacterias o virus, y para la vigilancia de las células tumorales. Una vez que la célula T CD8+ ha reconocido su antígeno y se ha activado, posee tres mecanismos para eliminar las células infectadas o malignas. La primera es a través de la secreción de citocinas, como TNF-α e IFN-γ, con efectos antitumorales y antimicrobianos.
La segunda función es la
producción y liberación de gránulos
citotóxicos. Estos gránulos, que también aparecen en las células NK, contienen dos
familias de proteínas, perforinas
y granzimas. Las perforinas forman un poro en la membrana de la célula
diana, similar al complejo de ataque a
la membrana del complemento.
Este poro permite que las granzimas entren en las células infectadas o
malignas. Las granzimas son serín-proteasas que procesan las proteínas en el
interior celular, bloqueando la producción de proteínas virales y, finalmente,
provocando la apoptosis de
la célula diana.
Los gránulos citotóxicos se
liberan únicamente en la dirección de la célula, lo cual se consigue a través
de las llamadas sinapsis
inmunitarias. De esta manera se evitan daños inespecíficos a otros
tejidos sanos circundantes. Una vez que han “matado” a una célula, pueden ir a
por la siguiente y empezar de nuevo, en un proceso llamado eliminación seriada.
La tercera modalidad de
destrucción es vía interacción de Fas/FasL.
Las células T CD8+ activadas expresan FasL en su superficie, lo que permite la
unión a su receptor, Fas, que se expresa en la superficie de las células diana.
Esta unión provoca que la molécula Fas de la superficie trimerice, iniciando
así una cascada de señalización. Las moléculas implicadas en esta cascada
promueven la activación de caspasas, lo que trae consigo la apoptosis de la
célula.
Linfocitos T reguladores
Son
linfocitos T que regulan o suprimen a otras células del sistema inmunitario.
Las células Treg controlan las respuestas inmunitarias de partículas extrañas o
propias (los antígenos) y
ayudan a prevenir enfermedades autoinmunes. Existen dos tipos principales: las
producidas en el timo (Tregs “naturales” – nTreg o Tregs del timo, tTreg) o
aquellas que se diferencian a partir de células T activadas en la periferia o
en cultivos celulares (Tregs “adaptativas o inducidas” – iTreg).
Las células
Treg se caracterizan por la expresión del correceptor de célula
T CD4 y la cadena a del receptor de IL-2,
CD25. Por tanto, su fenotipo es CD4+CD25+. La expresión
específica del factor de transcripción Forkhead box P3 (FoxP3)
permite el desarrollo y función de estas células. De hecho, FoxP3 es vital para
mantener la supresión del sistema inmunitario.
Fuentes de consulta
• Rojas
M. Williams. (2015). Inmunología de
Rojas, 17ª edición, Colombia: Fondo editorial.
• Abbas A.K. Lichtman A. H. y Pober J. S. 8º Ed. “Inmunología celular y molecular”.
Sanunders-Elsevier. (2015).